domingo, 21 de febrero de 2016

El monstruo


Os voy a hablar de El Monstruo. Me acecha desde hace 23 años. En silencio, en la oscuridad. No sabía mucho de él. Apareció un día en mi vida sin esperarlo. No me causaba demasiados problemas. Lo tenía escondido en el armario, no parecía muy fiero, pero por si acaso. Por las noches daba golpes en la puerta y gemía, quería salir.
Hablando con otras personas me explicaron que ellas también tenían monstruos y que algunos eran muy malos. Me aconsejaron que lo mejor que podía hacer era dejarlo salir, que andara libremente por la casa y que incluso otras personas lo conocieran. Me daba mucho miedo que lo vieran. Dios mio!
Me armé de valor y al día siguiente abrí la puerta del armario. Me sentí liberada, esa es la verdad. Que otros lo conocieran que supieran de su existencia me libró de una pesada carga.
Ya libre, empecé a conocerlo mejor y me asusté bastante. Mucho. En cualquier momento me podía dar un zarpazo y ya no lo contaba. Cada día era una lucha. Cuando me rozaba, mi cuerpo caía en un cansancio atroz, sin ganar de hacer nada en incluso llegaba a tener confusión mental.
Se hablaba en prensa de nuevos antídotos, pero costaban tanto dinero..., tanto que nunca podrían llegar a mi. El monstruo se apoderaba cada día de un lugar diferente de mi casa. En unos de los últimos roces me hizo daño de verdad. Las pruebas así lo decían, no tenía ilusión. Sin pensar llegó una luz de esperanza. Me iban a dar el antídoto, eso que decían que te libraría para siempre del monstruo. Cuantas veces había soñado con ese momento. Ocho semanas, 1 pastilla diaria.
Parece ser que mi monstruo ya está buscando nuevo alojamiento pues el 17 de mayo del 2016 se le acaba el contrato de arrendamiento de mi piso.
Estoy cansada de cargar con él a todos sitios. Pesa mucho.
Un besote.

domingo, 14 de febrero de 2016

Hoy primer día

Buenas tardes, hoy es primer blog estoy emocionada ha sido soñar, pensar y hacerlo. Hecho.
Es una tarde triste está lloviendo pero caray se necesita agua, mucha agua pero claro con tranquilidad que hace daño.
Al mediodía cuando comía pollo al horno, por cierto buenísimo, al masticar se me ha partido un trozo de muela (funda) que desastre y encima se me ha quedado una punta que me martiriza constantemente porqué me roza la lengua. Estoy deseando que acabe el domingo para llamar mañana lunes al dentista. Ojala me lo solucione rápido.
Estoy convaleciente de un resfriado muy fuerte o de una gripe quizás más suave. Hacía tiempo que no tenía fiebre aunque la tos ya era una habitante familiar en mis días de invierno. Ya puedo tomar lo que sea que siempre me visita, que fastidio. Por las noches no me deja descansar. Ahora he optado, me viene de herencia pues mi madre también lo hace, ponerme un botellín de agua en la mesita de noche y cuando me viene la tos trago va y trago viene. Lo que me faltaba para ir más al baño ya me levanto entre 3 o 4 veces cada noche...
Estoy finalizando mi tratamiento para la hepatitis C. Acabo el miércoles. No me lo puedo creer y en la última analítica el fármaco está funcionando. Casi ni me enterado y por eso pensaba que igual no me estaba haciendo efecto que pasaba de mi.
En otras entregas os hablaré de mi enfermedad por si hay otras personas que también tienen hepatitis. Me gustaría ayudar con mis palabras.
También estoy en proceso de cambio de ubicación de mi trabajo. Empezó hace ya algo más de 1 año y todavía estoy en el camino.
También tengo a mi padre en el hospital fractura de fémur, un fastidio para todos y más para él.
A mi hermana la han intervenido de cataratas.

Un besote.